Señal en la Luna - Sueño de Jesel (Chile)

Le pedí al señor confirmación, que si lo el juicio para Chile estaba cerca me diera señales.

El 24 de Agosto soñé que estaba en Viña del Mar (soy de Santiago) en una casa antigua y una señora que vivía ahí me cuidaba un niño de 5 años que yo le dejaba (aunque solo tengo hijos adolescentes).

En la ciudad, le decía a unos jóvenes que si veían una señal en la luna es porque ya venía el terremoto y les mostraba la luna, “así tiene que estar”, y se las indicaba y la luna estaba con una mezcla de colores lila, rosada, anaranjada y celeste, pero ellos no la querían ver.

En ese momento la persona que estaba conmigo (no se quién era), me decía: "Mira, los ratones, son también una señal que el sismo está por empezar”. 

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Y corríamos a la casa a buscar al niño que habíamos dejado y la persona que me acompañaba me grita y me dice "ven, ven mira” y en la pieza ya no estaba ni el niño que había dejado, ni la mujer que lo cuidaba pero sí muchos bebés que lloraban y yo decía “¿Señor, qué hago?” ; entonces, paso mi mano sobre ellos y comienzan a dormirse.

En ese momento comienza el movimiento más fuerte.

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Y de repente estoy en otro lugar, en el estacionamiento subterráneo de un supermercado. Tomo un carro de compras, lleno de mercadería y corro con él. Estaba en ese lugar un hombre de como 50 años corpulento y otros cuatro hombres jóvenes a su lado y me dice que me mire en un espejo que estaba en el subterráneo y vea lo que llevaba en la mano; y le digo: “es mi botella de agua”, y él me dice: “no es tuya, tienes que compartirla, o si no...” (no pude entender esa advertencia).

En eso otra persona que viene detrás de mí, con otro carro lleno de mercadería me explicó de qué estaba hablando ese hombre mayor, y otro hombre viene también con un carro lleno de alimentos y dice: “lo que te dijo a ti, sobre la cecina, es que debes que compartirla”. (Cecina: carne enlatada o embutida)

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La salida era como cuando salen los autos del subterráneo con una rampa ascendente y yo no tenía fuerza para empujar mi carro lleno de mercaderías hacia arriba por la rampa y pienso: “no me atrevo, me da temor mirar para atrás al hombre mayor para pedir más tiempo”, en ese momento uno de los otros hombre jóvenes que estaban al lado del hombre mayor se pone a mi lado toma mi carro y me dice "mi jefe dice que no dará más tiempo”, (como sabiendo lo que yo había pensado), pero si me autorizó ayudarte; entonces los dos empujamos el carro, y, al salir del estacionamiento la luz de la calle me despierta.

                                                                                                           

Jesel
Chile

Fuente: RugeelelondelatribudeJuda