Alcé mi vista y vi caer aun muchos mas, pero ya venían con piedras, todo combinado, pero todos pasaban por encima mío, me empecé a preocupar por las personas, pero mas por mi familia, por mi sobrino (por que el siempre se viene solo del colegio caminando y pensé que le caería alguna roca).
Quería salir de la sombra donde me encontraba pero una señora me cogió del brazo y me dijo: “no salgas están cayendo piedras”, me quedé parada viendo todo y de repente vi que una roca caía justo en mi frente y venían dos niñas caminando y las jale para que no les caiga.
Bueno allí acabo todo; las rocas y piedras eran de diferentes tamaños y diferentes formas y caían lento pero al caer al suelo caían con demasiado peso.
Vicky
(Chile)
Job
38:22 ¿Has entrado tú en los tesoros de la nieve,
O has visto los tesoros del granizo,
38:23 Que tengo reservados para el tiempo de angustia,
Para el día de la guerra y de la batalla?
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